Así lo aseguró la directora Provincial del Instituto de Investigación Social, Económica, Política y Ciudadana (ISEPCi), Belén Wagner tras demostrar, por medio de los datos del instituto, la crítica situación que atraviesan las familias de los sectores populares.
«Nosotros que relevamos los precios y cómo van variando en los comercios de cercanía, específicamente en los barrios populares, vemos que la situación se torna cada vez más difícil», aseguró Wagner y añadió que aparte de los alimentos de la canasta básica «en julio también aumentaron las tarifas en los servicios, en la telefonía y en el transporte. Hoy en Misiones, para un trabajador ir y volver en el día necesita más de 200 pesos. Si tiene que volver varias veces necesita gastar casi 500 pesos en un solo día en transporte, sumado a otros servicios como el colegio por ejemplo y eso impacta muy fuertemente en las familias».
Los datos arrojados por el ISEPCI demostraron que entre junio y julio una familia necesitó de $113. 779,62, es decir, «seis mil pesos más que el mes anterior para poder sobrevivir y comprar los 57 productos que integran la canasta básica. Las familias nos vienen diciendo una cuestión que es muy importante y que ya la venimos registrando hace más de dos años, y tiene que ver con la imposibilidad, en términos económicos, de poder comprar alimentos sanos, de calidad. Para nosotros es preocupante porque las familias vuelven a recurrir a comidas que llenan más la panza, pero que en términos nutritivos no aportan mucho».
Dando a entender que la región del NEA es la más afectada por la falta de políticas públicas que frenen el incremento de los precios, Wagner aseguró que «estamos en una Argentina que miles y miles de familias no llegan ni al 15 del mes. El gran problema que venimos registrando es que quienes diseñan las políticas públicas, no conocen a los destinatarios de las mismas. No conocen el territorio ni cómo se desenvuelven. Por ende, no conocen la realidad y Argentina con este mismo rumbo, con estás mismas acciones solo presenta un futuro muy oscuro».
«Un gran porcentaje de la población hoy no puede solventar la alimentación en sus propios hogares y esto es muy preocupante. El escenario por lo que vemos sigue incierto y sigue muy oscuro para las familias argentinas y nosotros creemos que realmente las políticas que se fueron implementando para nada frenaron la inflación y para nada estuvieron pensadas en esta cuestión tan importante que es la alimentación. Hoy, comer no es lo mismo que estar bien alimentado», aseguró Wagner, tras anunciar que durante el mes de agosto presentarán los datos de Misiones sobre Canastas Saludables, el nuevo indicador que muestra los valores nutricionales de los alimentos que reciben niños, niñas y adolescentes en la Argentina.