Fue en el marco del plan de contención social realizado por la Municipalidad de Posadas, a través del programa de la Unidad de Coordinación y Control de Gestión, el Centro Verde Municipal y la Secretaría de Obras y Servicios Públicos. El horno servirá como una herramienta de uso doméstico y laboral para quienes se encuentran recuperándose en el hogar.
En la Casita San Miguel del Hogar de Cristo se realizó la puesta en valor del 69° Horno Ecológico de la ciudad de Posadas, una iniciativa que busca promover prácticas sostenibles y amigables con el medio ambiente en la comunidad.
El Director del Hogar, el Padre Daniel Pesce, explicó que «el Hogar de Cristo está en todo el país. Nace con el Papa Francisco, cuando era arzobispo de Buenos Aires. Somos un grupo de sacerdotes y curas villeros y de barrios populares que acompañamos y recibimos la vida como viene», dijo.
Agregó que «acompañamos a muchos pibes que están en consumo problemático de sustancias, y particularmente esta casita de San Miguel Arcángel es el lugar donde damos respuesta a varios chicos. En este momento estamos teniendo a catorce pibes viviendo con nosotros, en un proceso de deshabituación del consumo de drogas, pero también en un proceso de recuperar la vida, de prepararse para el trabajo».
En cuanto a la importancia del horno ecológico para el hogar, el Padre sostuvo que «hace un tiempito atrás venimos fabricando pan casero y otras cosas, lo cual nos llevaba mucho tiempo. Esta propuesta de un horno sustentable ecológico nos ayuda a generar un producto de mejor calidad. Y eso también ayuda al sustento del hogar con el mismo trabajo de los chicos, como también con donaciones particulares y el apoyo estatal, que muchas veces llega por medio de la Municipalidad y del Gobierno de la Provincia de Misiones». Destacó la importancia de poder rescatar o darle una segunda oportunidad a los chicos.
En la construcción del horno participaron los chicos, que aprendieron a hacerlo. Los empleados o funcionarios de la Municipalidad instruyeron cómo.
En diálogo con la prensa, la secretaria de la Unidad de Coordinación y Gestión Municipal, Yolanda Asunción, afirmó que la construcción e implementación de los hornos ecológicos corresponde «a un programa que llevamos adelante desde el Municipio, en conjunto con Cameca, y este trabajo se lleva adelante en las asociaciones, los comedores, en los merenderos. Hoy, por ejemplo, estamos acá en la casita de San Miguel por un pedido a través del padre Daniel, donde están los chicos con problemática de adicciones. Nosotros desde el municipio buscamos siempre la inclusión de todas las personas».
La funcionaria detalló que el horno es ecológico porque «se construye de ladrillo de barro y de un tambor. Lleva una mínima cantidad de leña. Con cuatro o cinco astillas ya se puede hacer el fuego en el tambor, que se calienta y dura como dos o tres horas. En ese lapso se puede preparar el pan casero, las pizzas, hasta incluso hacer un asado dentro del horno. Lo ecológico es eso: la disminución del uso de la madera, del uso de leña». Este sistema destaca su practicidad y ahorro en el consumo de gas, permitiendo el autoabastecimiento y la sustentabilidad de la comunidad, promoviendo una eficiente cocción de alimentos que contribuye a la sostenibilidad.
La presidente de la Cooperativa de Trabajo Una Nueva Oportunidad que funciona en el Hogar San Miguel, Delia Dejarano, se mostró «agradecida por la posibilidad que nos otorgaron desde la Municipalidad de contar con esta herramienta, que para la cooperativa realmente es muy significativo y tiene un valor superlativo. Este proyecto es para darle una manera de autosustentabilidad a la población que tenemos acá, que son los chicos que están con problemas de consumo, que llegan a nuestro hogar realmente en estado de vulnerabilidad. El horno va a servir para que ellos elaboren su comida, para probarla o para después sacarla al mercado».
Hasta el momento se han fabricado más de 69 hornos en comedores y merenderos municipales, centros educativos y diversas organizaciones socio comunitarias. Son construidos a partir de ladrillos y tambores de 200 litros y se caracterizan por su sencillez y rapidez de fabricación a través de un técnico capacitado. De esta manera, la construcción de nuevas herramientas facilita el autoabastecimiento en alimentos además de aportar a la economía de los vecinos en los distintos espacios comunitarios, reemplazando el gas por trozos de leña, cartón o ramas.
Tras la introducción de seis panes caseros al tambor, que marcó la inauguración oficial del horno ecológico, los presentes pudieron deleitarse con panificados, dulces y salados.