En una conferencia de prensa, la ministra de Seguridad nacional intentó desvincularse del diputado Germán Kiczka, acusado de pedofilia, mientras crece la polémica por su cercanía con el prófugo tras la viralización de un video.
En medio de una intensa controversia por el desconocimiento del paradero de Germán Kiczka, el diputado libertario acusado de pedofilia, Patricia Bullrich, ministra de Seguridad y excandidata presidencial, intentó desvincularse a sí misma y al gobierno nacional de la situación del legislador y culpó a la justicia misionera: «debieron detenerlo antes. Nosotros lo hubieramos hecho así», sostuvo Bullrich en una conferencia de prensa que compartió este lunes con el gobernador de Santa Fé.

Página 12 publicó que en medio de una fuerte controversia, Patricia Bullrich, ministra de Seguridad y excandidata presidencial, participó de una conferencia de prensa en Santa Fe donde se le consultó sobre Germán Kiczka, el diputado libertario acusado de pedofilia y actualmente prófugo de la justicia.
Kiczka, del partido ACTIVAR, referente misionero de La Libertad Avanza, fue desaforado el 22 de agosto luego de que se confirmara su vinculación con una red de pedofilia en la provincia de Misiones. A pesar de la orden de captura emitida por la justicia, Kiczka logró escapar, generando una persecución internacional coordinada desde hace pocos días por Interpol.
En este marco, y consultada sobre las novedades del caso, Bullrich, visiblemente tensa, comentó: «Es un caso de justicia ordinaria de la provincia de Misiones. Hace dos días la provincia pidió a Interpol la orden de detención… Pero es un caso de la justicia provincial», señaló la ministra, enfatizando que la responsabilidad recae en las autoridades misioneras.
“Lamentablemente desde mi punto de vista, le sacaron los fueros tarde, deberían haberlo dejado detenido desde el momento que le avisaban que estaba imputado. Le avisaron, lo dejaron en su casa, y se escapó”, precisó la ministra.
En la misma línea, la funcionaria del gobierno libertario indicó que la justicia misionera debería haberle pedido a la Cámara de Diputados que le saquen los fueros antes y tenerlo adentro en el momento del procesamiento: «eso hubiésemos hecho nosotros”, señaló.
Y añadió: “nosotros lo empezamos a buscar, ya tenemos la tarjeta roja de interpol y lo vamos a agarrar adonde esté”.
No obstante, la controversia escaló al revelarse un video de meses atrás en el que Bullrich aparece junto a Kiczka durante la campaña electoral.
En el video, ambos políticos, entonces aliados en Juntos por el Cambio, compartían escenario y apoyaban a otros candidatos del espacio. Este material audiovisual no hizo más que avivar las críticas hacia Bullrich y su aparente cercanía con el ahora prófugo.
La situación empeoró para la ministra cuando se difundió una fotografía en la que Kiczka es visto en la Casa Rosada junto a Eduardo Serenellini, secretario de Prensa del gobierno, en una reunión que tuvo lugar poco antes de que se emitiera la orden de detención.
La imagen levantó serias dudas sobre el nivel de conocimiento que el gobierno podría haber tenido respecto al caso y su posible inacción para evitar la fuga del legislador.
En las últimas horas, las investigaciones revelaron que Kiczka fue visto en un hotel de Puerto Iguazú, cerca de la Triple Frontera.
Un audio filtrado lo muestra coordinando su escape a Brasil o Paraguay, lo que llevó a Interpol a emitir un alerta máxima para su captura internacional. «Rami, ¿cómo andás? Che, ¿me podrías preparar una pieza?», se escucha en la grabación, que muestra al diputado nervioso y apurado por concretar su huida.
Testigos en la zona también confirmaron su presencia en el hotel, donde se hospedó una noche antes de desaparecer nuevamente.
Estos nuevos hallazgos complicaron aún más la situación para Bullrich y otras figuras políticas involucradas, quienes ahora deben enfrentar la creciente presión pública y las demandas de respuestas.