La Red de Espacios Maker (dependiente de la Escuela de Robótica) brinda lugares de formación disruptiva para los misioneros en sus respectivas localidades, llegando a cubrir los 78 municipios con 81 sedes.
En este marco, la Red Maker de Santa Ana y la EPET N° 19, han unido sus esfuerzos para desarrollar un impresionante prototipo de un “sistema automatizado de cinta transportadora con brazo robótico”.
Este proyecto es fruto del trabajo de los estudiantes Ávalos Facundo, Ibachuta Agustín, y Quinten Juan, quienes se embarcaron en el desafío de proponer una solución a la necesidad de clasificar los productos de forma eficiente y precisa para la industria misionera. Lo hicieron a través de la automatización del proceso de clasificación, utilizando un brazo robótico clasificador de productos.
Uno de los elementos fundamentales es el desarrollo de algoritmos de clasificación inteligente, que permitirán al brazo robótico identificar y seleccionar los productos en función de sus características específicas, como forma, tamaño, color o etiquetado. Estos algoritmos se ajustarán y optimizarán continuamente mediante técnicas de aprendizaje automático para mejorar la precisión y la velocidad de clasificación.
“Este proyecto es un claro ejemplo del potencial que tienen nuestros jóvenes cuando se les proporciona el espacio y los recursos adecuados, como lo ha hecho la Escuela de Robótica con nosotros”, comentó el docente de la EPET, Marcelo Romero.
Además, remarcó que la Escuela de Robótica es un faro de innovación, proporcionando un ambiente propicio para que los jóvenes desarrollen habilidades clave en robótica, ingeniería y diseño industrial. También resaltó el apoyo a las instituciones para promover estos trabajos colaborativos que coloca a los estudiantes como centro de la escena.
Para finalizar, Romero destacó que el prototipo desarrollado no solo demuestra el talento y la capacidad de los estudiantes misioneros, sino también su compromiso con el desarrollo tecnológico local. “Estamos orgullosos de apoyar iniciativas que no solo promueven el aprendizaje práctico, sino que también contribuyen al crecimiento económico y tecnológico de nuestra comunidad“, completó.