El gasto consolida el ajuste

Los gastos totales del Sector Público Nacional fueron de $10,79 billones en el mes de junio, lo que representa una alza real de 0,6% interanual. Esto evidencia la consolidación del ajuste realizado en 2024, siendo que al comparar el gasto total contra junio 2023, se observa una baja significativa que alcanza 34,8%.

En esta línea, dentro de las prestaciones sociales, únicamente las partidas de Asignación Universal para Protección Social (+56,7%) y Prestaciones del INSSJP (+11,4%) se incrementaron en relación con junio 2023. No obstante, no lograron compensar la caída de las prestaciones sociales (-16,9%) frente al mismo período. Asimismo, se destacan las contracciones en jubilaciones y pensiones contributivas (-12,3%), Pensiones no contributivas (-13,8%) y Asignaciones Familiares Activos, Pasivos y otras (-41,3%) como algunas de las partidas que explican el ajuste dentro de las prestaciones sociales.

Continuando en la partida de jubilaciones y pensiones, el DNU 274/2024 modificó la fórmula de movilidad, indexando los haberes a la inflación. Si bien garantiza estabilidad en el poder de compra en el mediano plazo, impide mejoras reales. Para quienes perciben la mínima, con el bono se sostuvo congelado en $70.000 desde marzo de 2024. No obstante, el 10 de julio 2025 se votó un incremento para las jubilaciones y pensiones contributivas (incluye las pensiones no contributivas) de 7,2%, al igual que un aumento nominal del bono en $40.000 (pasaría a $110.000), junto a su respectiva indexación a la inflación.

Asimismo, los subsidios económicos observaron una reducción de 81,5% en términos reales en junio 2025 contra el mismo mes de 2023. Dentro de esta partida, los subsidios a la energía cayeron 86,6% y al transporte 59,8%. Otra partida que evidencia la consolidación del ajuste realizada son transferencias a provincias (-34,3%) y a universidades (-91,9%).

Por otro lado, se continúa vislumbrando la paralización en los gastos de capital, al observar en junio 2025 una nueva caída interanual de 29,9% en términos reales. Al realizar la comparación con junio 2023 la contracción alcanza 82,1%, evidenciando que hasta el momento no se observan señales de reactivación de la obra pública, lo que podría estar incumpliendo lo dispuesto por el Congreso en la Ley de Bases[2]. Por su parte, la baja en el gasto en subsidios económicos también registró una retracción interanual en términos reales de 28,4%. En este caso, se explica por la reducción en la compra de gas importado, conllevando una reducción de los subsidios en energía por 28,7%. Asimismo, la reducción de los subsidios al transporte, que alcanzó un 21,4%, se explica principalmente por la decisión del gobierno de discontinuar las compensaciones tarifarias al transporte público en el AMBA a través del sistema SUBE.

En el caso de transferencias a universidades se observó un incremento interanual de 64,7% en términos reales. Sin embargo, al igual que como ocurrió en junio 2024, no realizaron el pago a universidades, postergándolo contra el mes siguiente. Resulta importante considerar que el dato publicado es en base caja, por lo que en base devengado computará para el mes de junio.

Durante junio, las transferencias a las provincias experimentaron un incremento del 136,5%. Este aumento se explica, principalmente, por el cumplimiento de la medida cautelar dispuesta por la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN 1864/2022) a favor de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, representando aproximadamente la mitad de las transferencias.

Los gastos de funcionamiento observaron una caída interanual en términos reales de 1,8%. Esto se debe a que, si bien los salarios de la administración pública nacional se incrementaron 3,3% interanual, el resto de los gastos de funcionamiento cayeron 19,9% en el mismo período. Es importante tener en consideración que el ajuste sobre esta partida se sostiene, dado que el gasto en salarios se mantiene 24,9% en términos reales por debajo de junio 2023.

Por último, el rubro “Otros programas” (dentro de las prestaciones sociales) continúa recortándose 31,6% en relación a junio de 2024, y 63,9% comprando contra el mismo mes de 2023. En este rubro se incluyen políticas sociales dirigidas a los sectores más vulnerables, como la Tarjeta Alimentar, transferencias a comedores comunitarios y merenderos, el ex programa “Potenciar Trabajo” y el programa Acompañar, entre otros. Algunos programas fueron interrumpidos, otros reducidos (como Acompañar y Becas Progresar), y otros licuados sus montos. En el Potenciar Trabajo, por ejemplo, los montos permanecieron congelados todo 2024 y así continuaron en el primer cuatrimestre de 2025, erosionando su poder adquisitivo. En lo relativo a la Tarjeta Alimentar, su monto se encuentra congelado desde junio 2024.

FUENTE: CEPA