La secretaria general del Sindicato Unico de Obreros Rurales (SUOR), Ana Cubilla habló en Radio News Misiones con el licenciado Ariel Sayas respecto de la situación en el sector yerbatero de Misiones.
La gremialista afirmó que el sector atraviesa un momento crítico tras la eliminación del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) por parte del gobierno de Javier Milei y que los más afectados son los cosecheros y los productores primarios.
El estado de situación “es gravísimo”, dijo Cubilla y sostuvo que el sector se halla “en estado de coma, porque es una situación muy grave”.
“Desde la asunción de Javier Millei, ya con el DNU que eliminó el INYM, al sacarnos la institución donde se discute precio, a partir de ahí ya empezó la lucha, las reuniones, las asambleas, las contradicciones”
Apeló a la ironía para decir que “esto de que los productores también votaron a ese cambio que tanto querían», al referirse al apoyo que dió el sector yerbatero en la campaña electoral de Javier Milei.
Las consecuencias del gobierno que eligieron los del sector yerbatero son graves y Cubillas señaló que los productores se encuentran ahora en un estado de incertidumbre y desilusión, ya que el DNU 7023 los alejó de la potestad de fijar los precios de su producción.
«La disolución del Instituto Nacional de la Yerba Mate , que ayer salió en el boletín oficial, le saca la potestad de poder decir cuánto va a valer tu producción, y a partir de cuánto va a valer tu producción, empezá a hablar de la mano de obra, de todo lo que significa eso para esta producción tan importante en la provincia, que genera cientos de miles de manos de obra, de familias, directa e indirectamente», comentó Cubilla.
MEJOR QUE DECIR
La líder sindical enfatizó la necesidad de pasar de las conversaciones a la acción, aunque reconoció que muchos todavía mantienen la esperanza de que la situación pueda cambiar. «Estamos en una situación realmente caótica, grave”.
Para revertir esto “tenemos que pasar a la acción”, dijo al deslizar la posibilidad de iniciar acciones de protesta.
Sin embargo aclaró que “para que suceda eso todavía tenemos que seguir conversando, hablando, porque parece que todavía tienen una esperanza de que va a pasar otra cosa, y la realidad, desde nuestro punto de vista como sindicato y como trabajadores, como organización sindical, pensamos que no va a haber una mejoría, porque las instituciones están destruidas, se destruyen desde adentro.»
Recordó entonces ccómo la creación del INYM -hace más de 20 años- había sido un logro significativo para el sector, producto de una lucha conjunta a partir del “tractorazo” que movió el tablero político provincial y nacional.
Lamentó que muchos han olvidado esos tiempos. «Todavía hay una esperanza de que algo va a cambiar, y hay disidencia en el sentido de, a ver, juntémonos todos y hagamos lo que hay que hacer, una gran lucha como se hizo en su momento para la creación del Instituto Nacional de la Yerba Mate, hace más de 20 años atrás, donde también pasó esto, donde también se cambiaba la yerba por mercadería y que después finalizaron en el tractorazo.»
El impacto de la crisis yerbatera también afecta a los trabajadores, quienes enfrentan la posibilidad de no recibir sus pagos de intercosecha. Cubilla explicó la situación crítica de los trabajadores rurales en diferentes provincias. «Nosotros somos una federación, el nuevo sindicalismo rural, CONFETARA, hoy es una federación, y tenemos sindicatos como El SUOR, también en otras provincias como Salta, San Juan, provincia de Buenos Aires, y esas producciones regionales que generan mucha mano de obra, que también cobran intercosecha porque es un programa nacional”, explicó.
Estas organizaciones “ya no cobraron los meses anteriores, por ejemplo, en Salta los trabajadores tabacaleros no cobraron intercosecha, por lo tanto, no me da ninguna solución, o sea que vayan a pagar Misiones ahora cuando termine la cosecha de la yerba mate el mes que viene», destacó.
Cabe recordar que en Misiones el sector de los tabacaleros también se halla en una situación critica porque no percibieron recursos, por lo que en la semana realizaron cortes de ruta en la intersección de le las rutas rutas provinciales 20 y 17 en Pozo Azul.
MALA ELECCIÓN
En las elecciones pasadas, según Cubilla, muchos productores que votaron a Javier Milei y ahora se sienten arrepentidos y frustrados con el cambio de gobierno. “Están súper arrepentidos. Nosotros nos reunimos con él creo que hace un tiempo y los productores que fueron ahí, que habían sido unos 20 o 25 productores, en la imagen de una mesa, donde están sentados los productores, los trabajadores, otra cadena de yerbateros, que también estuvieron en el Instituto de Yerba Mate los funcionarios, dijeron que el país se habían encontrado hecho pelota y que por eso está pasando esto, y repiten todos el mismo discurso que da Milei”, dijo.
Respecto a esto sostuvo que los productores aceptaron “el cambio” propuesto por el gobierno, “en consonancia dijeron que sí, que también creían que tenía que haber un cambio, pero que no ese cambio, el de no abrirnos las importaciones, el de sacar a los institutos», relató.
La crisis también está generando un desarraigo significativo, con trabajadores buscando empleo en Brasil y enfrentando problemas sociales y económicos severos. «El desarraigo en la familia tarefera es tremendo, seguramente eso también como información lo tenés, el problema social que genera, digamos, toda esta catástrofe que vino a hacer este gobierno, va a ser difícil de poder restaurarlo», advirtió Cubilla.
Finalmente, Cubilla expresó su esperanza de que las diversas organizaciones puedan unirse para enfrentar la crisis. «La unidad es muy difícil, pero tanto nosotros como otros que sí construyen la unidad con organizaciones sociales, con organizaciones sindicales, con organizaciones políticas, con organizaciones de productores, productoras, de cooperativismo, de la CAME, hay muchas organizaciones que están”, sostuvo.
Las acciones son lentas, “parecen medio dormidos, pero ahora se están despertando, empezando nuevamente a construir esta gran marcha, lucha. Estoy más que segura de que no se van a quedar de brazos cruzados», concluyó.