Economistas advierten que la desarticulación del INYM, tuvo un duro impacto en el bolsillo de lo consumidores y la cadena productiva de la yerba

Un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), revela que el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023, firmado por Javier Milei el 20 de diciembre de 2023, ha sacudido profundamente el sector yerbatero argentino y afecta a los precios en los comercios.

El estudio destaca que “el DNU 70 significó la derogación de la Ley N°27.114 y la modificación y derogación de artículos de la Ley 25.564 vinculada a la yerba mate”. La primera ley regulaba el envasado en origen, mientras que la segunda establecía el funcionamiento del INYM.

“La eliminación de las regulaciones relacionadas con el registro de la producción, la promoción de cooperativas yerbateras y los acuerdos semestrales sobre precios ha generado una gran preocupación”, señalaron los economistas del CEPA. Estas regulaciones permitían al INYM equilibrar la oferta y la demanda, así como fijar precios en el sector.

El impacto en los precios ha sido significativo porque “a partir de abril de 2024, la desregulación y la inacción del INYM llevaron a que el precio de la materia prima alcanzara entre $260 y $300 por kilogramo,” según el informe. Este cambio ha reducido el porcentaje que reciben los productores del precio final en góndola a solo un 5,8%, una disminución del 3,1 puntos porcentuales en comparación con junio de 2023.

La situación se complica con el aumento de las importaciones de yerba mate. “En los primeros seis meses de 2024, las importaciones de yerba mate canchada y molida aumentaron un 394% en comparación con el mismo periodo del año anterior,” de acuerdo con datos del INDEC. Las principales importaciones provienen de Paraguay y Brasil, y grandes industrias como Las Marías y La Cachuera lideran esta tendencia.

Los economistas indican que perjuicio a los productores queda claro porque ingresan la materia prima a un costo promedio de 1,2 dólares el kilo que, al valor oficial más el impuesto país da unos $1.333, en cambio, la yerba canchada que se compra en secaderos se paga a $1.800, por lo tanto, en este momento los industriales reponen stock a precios bajos y le pagan menos al productor local por la canchada o la hoja verde, además de estirar los plazos de pago, generándoles un fuerte perjuicio. “El aumento de importaciones ha permitido a las industrias reponer stock a precios bajos, mientras que los productores locales reciben menos por la yerba que venden”.

El consumo interno también ha disminuido. “En el primer semestre de 2024, el volumen de yerba mate elaborada cayó un 15% en comparación con el mismo periodo del año anterior,” revelaron los datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate. Esta caída en el consumo se suma a los desafíos enfrentados por los productores en un contexto de inflación creciente y reducción del poder adquisitivo.

“No es la primera vez que se desregula el mercado yerbatero; en los años 90, la eliminación de regulaciones similares condujo a una caída drástica en los precios,” recuerda el informe del CEPA. Durante esa década, el precio de la yerba canchada se desplomó de $930 pesos/dólares por tonelada en 1990 a $349 pesos/dólares en 2001, mientras que el precio de la hoja verde descendió de $202 pesos/dólares a $42 pesos/dólares.

Es iportante recarcar que el DNU 70 busca desregular la industria yerbatera y ha generado una gran controversia al eliminar varias disposiciones clave de la Ley 25.564, que otorgaban al Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) la facultad de fijar precios y regular la producción en Misiones y Corrientes, principales regiones productoras.

Así, la eliminación de INYM por el DNU 70 ha desestabilizado la cadena de valor yerbatera, exacerbando la crisis de precios y afectando gravemente a los pequeños productores. La desregulación, sumada a la apertura de importaciones y la caída del consumo, presenta un panorama desafiante para el sector en los próximos meses.