El Colegio de Profesionales de Enfermería de Misiones advirtió sobre la grave falta de control en el sector privado, donde personal sin título realiza tareas complejas a cambio de salarios irrisorios. El Licenciado Sergio Ulrich, presidente de la institución, rechazó la desregulación nacional y exigió a los pacientes que demanden la exhibición de la matrícula profesional.
Sergio Ulrich, Licenciado y Presidente del Colegio de Profesionales de Enfermería de Misiones, expuso en Radio News https://news.appradio.ar/ una problemática “muy grave” que afecta a la salud privada en la provincia: la contratación de personal sin la titulación necesaria para ejercer la enfermería, conocidos como “empíricos”. Según Ulrich, esta práctica pone en riesgo a la comunidad y persiste a pesar de la existencia de miles de profesionales capacitados en la provincia.
El Lic. Ulrich se hizo cargo de sus declaraciones y señaló que viene luchando para regular esta situación, que afecta a diversos sanatorios privados. “Yo no puedo regular el ejercicio de la profesión,” lamentó.
La lucha contra la desregulación
El Colegio de Profesionales de Enfermería de Misiones se opone rotundamente a la intención del gobierno nacional de eliminar las colegiaturas, argumentando que estos organismos son cruciales para el control del ejercicio profesional, proteger a los trabajadores y a la comunidad, y mantener el estándar de calidad.
Ulrich destacó que, afortunadamente, los colegios de Misiones fueron creados por ley provincial, no nacional, lo que otorga autonomía a la provincia para dictar y sancionar leyes, ofreciendo cierta protección.
“No estamos de acuerdo,” afirmó el Licenciado. Según Ulrich, si actualmente, con la existencia del Colegio, tienen problemas para regular y controlar las matrículas, dejar el sector librado a su suerte sería peor. “Imaginate sacar un colegio que medianamente está tratando de regular el ejercicio,” enfatizó, señalando que esta problemática no solo afecta a la enfermería, sino también a otras profesiones como médicos, abogados e instrumentadores.
El factor económico: pagar sueldos de miseria
El principal motor detrás de la contratación de personal no matriculado es la diferencia salarial, según el titular del Colegio.
Ulrich explicó que pagarle un sueldo de “250, 300 mil pesos” a un empírico que hace 20 guardias “obviamente no es lo mismo que pagarle un profesional 1 millón o un millón y medio”.
El problema se agrava porque algunas instituciones argumentan que «No hay enfermeros» como excusa para estas contrataciones. Esta afirmación fue categóricamente rechazada por el Colegio: “Enfermero nosotros tenemos para, como dicen los misioneros, para hacer dulce”.
En la provincia, existen licenciados, magísteres y doctores en enfermería. El Colegio de Profesionales de Enfermería de Misiones cuenta con aproximadamente 4.200 a 4.300 matriculados entre enfermeros y licenciados, además de unos 900 auxiliares (de la vieja escuela). Ulrich aseguró que hay profesionales “de sobra” en toda la provincia, incluyendo localidades del interior.
Riesgo a la comunidad y llamados a la acción
Ulrich advirtió que la falta de regulación puede llevar a situaciones extremas: “Ha pasado y sigue pasando, terminan siendo el enfermero vos te… si es una mucama, si es el que cocina, si es el que… el que limpia el piso en algunos sanatorios es el que me termina poniendo una sonda”.
El presidente del Colegio lamentó que tener que luchar por la regulación básica impide avanzar hacia una “enfermería avanzada”.
Para el próximo año, el Colegio planea intensificar la lucha, buscando el apoyo de la justicia y la provincia. “El año que viene sí lo vamos con todos,” anunció. Incluso advirtió que, si las instituciones no regulan, dará a conocer los nombres y apellidos de las que incurren en esta falta.
Como medida de protección, Ulrich instó a la población a tomar precauciones al atenderse en centros privados: “La persona que vaya a un hospital, perdón, a un sanatorio le exija que exhiba la matrícula el enfermero, porque el enfermero, el que es matriculado en nuestro colegio no tiene nada que esconder”.
Aunque hay enfermeros profesionales en las instituciones privadas, también hay empíricos. Ulrich concluyó que quienes cometen mala praxis y no son enfermeros son inmediatamente expuestos por el Colegio para aclarar que no pertenecen a la profesión matriculada. La solución, según el Lic. Ulrich, pasa por la voluntad de las instituciones de “regular y hacer las cosas bien”.