Las autoridades de la Universidad Nacional de Misiones brindaron, este 27 de junio, una conferencia de prensa para expresarse respecto de las políticas presupuestarias nacionales en relación a la educación superior. El Decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Dardo Martí, dialogó con el licenciado Ariel Sayas, en Radio News, respecto de la postura de la institución.
El actual Decano de la Facultad de Ciencias Exactas; Químicas y Naturales de la Universidad Nacional de Misiones, Dr. Dardo Martí, explicó los reclamos durante la sesión del Honorable Consejo Superior de la Universidad Nacional de Misiones, realizada ayer.
El órgano máximo de gobierno de la Universidad Nacional de Misiones se hizo eco de todos los reclamos tanto de la intersindical que lucha por la recomposición de los salarios de los trabajadores de las universidades nacionales, como de los docentes y no docentes.
Martí afirmó que «en el medio de esta pelea que nosotros, como autoridades, venimos dando para gastos de funcionamiento también están muy atrasados los salarios de los trabajadores y eso tiene mucho que ver con la vida cotidiana de cada una de las personas que trabaja en la UNaM. Nosotros, en este país seguimos teniendo una de las inflaciones más altas del mundo y la cuestión está cambiando fuertemente de color, digamos, está pasando de claro a oscuro y no hay previsibilidad».
El Decano explicó que «el Consejo Superior de el día de ayer (26 de junio) elaboró una resolución que va a ser publicada».
Recordó que hace dos meses todas las universidades del país se manifestaron contra los recortes presupuestarios en una multitudinaria marcha en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y replicada en cada una de las ciudades donde existen sedes de Universidades Nacionales, pero que «ninguna de las situaciones planteadas en la marcha de abril se ha resuelto definitivamente para este año, es todo mes a mes una lucha».
Además, remarcó que «gran parte de los trabajadores de las categorías de ingresos o auxiliares están ya casi de día todo por debajo de la pobreza» y que «después de seis meses de la nueva administración nacional el salario de los trabajadores de docentes y no docentes se licuó totalmente».
Martí también expresó preocupación por la repercusión en los sistemas de salud, indicando que «cada uno de ellos ahora hace un aporte significativamente menor a los sistemas de salud que ellos tienen desde el punto de vista solidario». Resaltó que «la salud ha tenido un aumento en las erogaciones en productos, en insumos importados y bueno cuestiones normales que tienen unos aumentos extraordinarios y que hoy están poniendo en riesgo seriamente todo ese sistema».
Al ser consultado sobre si la movilización masiva de hace 60 días había generado algún cambio, Martí respondió: «la sensación es correcta porque además de que fueron atendidos con unas cuestiones gracias a esa marcha que hubo, una repercusión social importantísima de las más importantes desde el punto de vista de que fue muy genuina de la sociedad, en la marcha nos encontramos autoridades de la universidad y votantes del acto del gobierno y dijimos bueno la universidad pública es esto, lo que es un tesoro que debemos conservar, sin embargo no cambió desde el punto de vista de lo presupuestario».
El Decano enfatizó la falta de previsibilidad presupuestaria, indicando que «aunque no estén los fondos, pero sí que esté el instrumento legal que nos dé la garantía de que nosotros podemos tener algún tipo de predicción».
Finalmente, mencionó una discrepancia a nivel federal: «la Universidad de Buenos Aires sí lo tiene (los fondos). La UBA lo tiene hasta el fin de año. Entonces, eso hace que nosotros estemos rompiendo cosas sagradas de la sociedad, que son estas cuestiones de la organización y del funcionamiento normal y lógico».
Martí concluyó con un llamado a la transparencia de gestión al Gobierno Nacional. «Eso hay que ponerlo en evidencia y mostrárselo a la sociedad, porque nosotros somos la sociedad y todos los argentinos son dueños, son parte de la Universidad pública».