Ante los cambios de temperaturas que pueden afectar especialmente a los niños
menores de 5 años y a las personas mayores de 65 años causando enfermedades
por virus o bacterias y provocar síntomas como tos, fiebre, dolor de garganta,
dificultad para respirar, entre otros.

El Ministerio de Salud Pública recomienda
seguir las siguientes medidas de prevención:
Completar el esquema de vacunación.
Lavarse las manos con agua y jabón después de volver de la calle, antes
de cocinar o comer y después de ir al baño.
Cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo descartable o con el pliegue del
codo al toser o estornudar.
Evitar tocarse los ojos, la boca o la nariz con las manos sucias.
Si está enfermo, hacer reposo en el hogar por al menos 24 horas
posteriores a la desaparición de la fiebre y/o mejoría de los síntomas. De
esta manera se evita contagiar a otras personas y se favorece la
recuperación.
No automedicarse. El consumo de remedios sin receta puede producir
intoxicación y ocultar los síntomas de la enfermedad, dificultando un
diagnóstico correcto y empeorando el cuadro clínico.
Ventilar todos los ambientes a diario. Esto permite renovar el aire y
disminuir la concentración de virus y bacterias que pueden causar
enfermedades respiratorias.
Mantener los ambientes libres del humo del tabaco.
De esta manera, siguiendo las medidas de recomendación se puede reducir el
riesgo de contraer y transmitir enfermedades respiratorias que pueden afectar la
salud y la calidad de vida de las personas, y ante cualquier signo o síntoma de
alarma debe consultar al médico o recurrir al centro de atención más cercano a su
domicilio.