El presidente de la Legislatura Provincial y candidato a Diputado Nacional, Dr. Oscar Herrera Ahuad, difundió reflexiones sobre la situación actual de la cadena yerbatera. Con críticas a la desregulación aplicada por el gobierno nacional y al vaciamiento del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), reivindicó el antecedente alcanzado durante su gestión como gobernador, cuando se logró que el kilo de hoja verde se pagara 50 centavos de dólar, cifra histórica que permitió a miles de productores saldar deudas, invertir y sostener su producción.

- La desregulación redujo drásticamente el precio que perciben los productores de yerba mate, por eso, restablecer la referencia de 50 centavos de dólar por kilo de hoja verde -logro alcanzado durante mi gestión como gobernador- se convierte en una prioridad y un reto para la dirigencia política.
- Mientras la crisis de los productores se profundiza, con fuertes pérdidas en las ganancias por la materia prima, los opositores a la desregulación del sector yerbatero debemos poner en la agenda política y las opciones que permitan superar esta etapa que se extiende por la intransigencia libertaria a dar marcha atrás a la desregulación del sector y el “vacío” en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM)
- En 2023 logramos un laudo histórico: el Ministerio de Agricultura, a través de la resolución 107/23, determinó un precio que equivalía en ese momento a 50 centavos de dólar. Si actualizamos ese valor, hoy serían alrededor de 650 pesos por kilo. Junto al INYM, que en ese entonces presidía el actual diputado Juan José Szychowski, impulsamos esa meta convencidos de que los productores debían cobrar 50 centavos de dólar por kilo de hoja verde.
- Para muchos productores, ese laudo significó la posibilidad de saldar deudas y reinvertir en la chacra. Hasta los más opositores admitieron finalmente que los productores pudieron comprarse nuevos vehículos, tractores, maquinarias e insumos para trabajar sus chacras y “ganarle” a la inflación, ya que además del precio récord, se había logrado que cobren al contado y no a plazos de hasta 180 días como se está pagando hoy.
- Tras la eliminación del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) y la desregulación de precios, la situación se deterioró. El ministro de Desregulación nacional, Federico Sturzenegger, festejó que el kilo de hoja verde se paga apenas $250 -una caída superior al 100% respecto de lo que habría sido con un INYM regulador, manteniendo los 50 centavos de dólar hoy cobrarían $650 por kilo de hoja verde alcanzados en 2023- y prometió no solo no volver atrás sino que eliminó las restricciones de plantación que protegían a los más pequeños productores frente a los más grandes industriales que plantan miles de hectáreas para asegurarse una materia prima barata.
- Estudios señalan que el precio en 2023 superaba al oficial, ya que los productores llegaron a cobrar $370 (u$0,58) bajando hasta $250 en 2025, cuando debería ser de $650, afectando a los miles de productores que vieron caer su rendimiento económico. El libre mercado pasó a potenciar las ganancias de los molinos en detrimento de los eslabones más débiles de la cadena yerbatera.
- ¿Cómo volver a los 50 centavos de dólar?: La respuesta no es sencilla, pero varios actores coinciden en que el camino pasa por una intervención pública que reequilibre la cadena yerbatera. Yo propongo restituir las facultades al INYM y de ser necesario el laudo atado a una referencia en dólares. La idea es reinstalar el INYM con facultades para fijar un precio sostén, actualizarlo semestralmente. El desafío de la política es poner de nuevo al productor en el centro y lograr que se pague lo que corresponde. Otra propuesta es buscar mecanismos de financiamiento y aumentar la productividad, de modo que el productor obtenga más ingresos por hectárea.
Mientras que, los defensores de la desregulación sostienen que el mercado debería fijar el precio libremente, como ocurre actualmente. Sin embargo, la evidencia reciente demuestra que la caída de precios no se traduce en un beneficio proporcional para el consumidor y que la concentración de la industria agranda la brecha entre origen y góndola.
La teoría del libre mercado sucumbe ante la realidad, hoy, según datos oficiales, la producción cae, por efecto del clima, un 25% y las ventas aumentan un 15%; entonces el precio debería subir, teoría del mercado. Sin embargo los precios al productor caen, mientras que en góndola, se mantienen y suben, esto se debe a que la Yerba es un mercado imperfecto, que necesita regulación para distribuir las ganancias en forma equitativa. Por eso, mantener un mínimo regulado de 50 centavos de dólar puede ser un incentivo para sostener la producción y evitar el desarraigo rural. - El debate sobre el precio de la yerba mate ha subido al escenario electoral. Candidatos de diferentes fuerzas ya incorporan en sus plataformas la necesidad de legislar sobre la cadena yerbatera. Para mí, la meta es clara: volver a conseguir 50 centavos que equivales de dólar que equivalen a $ 650 por kilo de hoja verde no es nostalgia, es justicia para nuestras familias productoras. En la vereda opuesta, dirigentes liberales defienden la continuidad de la desregulación y confían en la competencia para bajar los precios al consumidor.
- Más allá de las diferencias de posición, todos coincidimos en que es necesario avanzar en una política integral que combine un precio sostén, financiamiento para modernizar nuestras chacras, promoción del consumo y apertura de mercados externos. Un ejemplo de esto es la apertura del mercado de la India que conseguimos, y que permitió que una cooperativa de Santo Pipó realizara la primera exportación hacia ese destino. Solo de esa manera podremos retomar el valor de referencia que en 2023 consideramos justo.
Volver a obtener 50 centavos de dólar por kilo de yerba mate es un desafío complejo, que involucra economía, política y desarrollo regional. La historia reciente demuestra que es posible establecer un precio justo para nuestros productores y al mismo tiempo sostener altos niveles de consumo. Durante mi gobernación no solo alcanzamos los mejores precios históricos, sino que también se batieron récords de ventas en el mercado interno y en las exportaciones, porque entendimos que el cuidado de la calidad y la promoción debían ser políticas de Estado, como lo confirman las estadísticas.
La gran pregunta hoy es si la dirigencia política tendrá la voluntad y la capacidad de construir los acuerdos necesarios para que ese objetivo sea sostenible en el tiempo, y no apenas una excepción.
Estas reflexiones del Dr. Oscar Herrera Ahuad plantean un interrogante central: si la dirigencia política tendrá la voluntad y la capacidad de construir los acuerdos necesarios para garantizar un precio justo y sostenible para la yerba mate, sosteniendo así la producción y la vida de miles de familias productoras en Misiones y la región